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Autoestima

Entendiendo la autoestima y cómo fortalecerla desde la psicología

Sobre la Autoestima

La autoestima es la forma en que nos valoramos y nos relacionamos con nosotros mismos. Es la base de nuestra confianza, nuestras decisiones y la manera en que afrontamos los desafíos de la vida. Tener una autoestima sana no significa sentirse bien todo el tiempo, sino reconocer el propio valor incluso en los momentos difíciles.

Cuando la autoestima es baja, solemos ser muy críticos con nosotros mismos. Aparecen pensamientos como “no soy suficiente”, “nunca lo hago bien” o “los demás son mejores que yo”. Esto puede afectar nuestra forma de actuar, nuestras relaciones y la manera en que enfrentamos los retos. Una autoestima dañada puede llevar a la inseguridad, el perfeccionismo, la ansiedad o incluso la tristeza profunda. 

Aunque creemos que tener una buena autoestima es tener una Alta autoestima, esto no sería lo ideal. Lo preferible es tener una Sana Autoestima, reconociendo y aceptando nuestras fortalezas y virtudes, así como nuestros defectos y errores.

La buena noticia es que la autoestima se puede trabajar y fortalecer. Enfocando el tratamiento en comprender de dónde vienen esas creencias negativas y en construir una mirada más compasiva y equilibrada hacia uno mismo.

Durante la terapia, aprendemos a identificar los pensamientos automáticos que alimentan la inseguridad y a reemplazarlos por mensajes más realistas y amables. También se trabaja en reconocer los logros personales, establecer límites saludables y desarrollar habilidades que refuercen la confianza y el bienestar emocional.

Un aspecto clave es aprender a tratarte con el mismo respeto y cariño con el que tratarías a alguien que amas. La autoestima no se construye de la noche a la mañana, pero con acompañamiento profesional y práctica constante, es posible crear una relación más sana contigo mismo/a.

Fortalecer tu autoestima te permite tomar decisiones con más seguridad, disfrutar de tus relaciones sin miedo al rechazo y sentirte capaz de afrontar los cambios con confianza. Es un proceso de crecimiento, de volver a mirar dentro de ti y descubrir que ya tienes todo lo necesario para avanzar.

Si sientes que tu autoestima está afectando tu bienestar, recuerda: no estás solo/a. Dar el paso de pedir apoyo puede ser el comienzo de una vida más plena, auténtica y en paz contigo mismo/a.